El joker

Es el más imprescindible y despiadado de los enemigos de Batman, un psicópata que matará a cualquiera - hasta a sus propios cómplices - casi sin avisar, sólo por su propia diversión. Hace mucho que los reporteros de Ciudad Gótica dejaron de llamarlo “Príncipe Payaso del Crimen”, pues hasta ellos se han dado cuenta de que no hay nada gracioso en torno al Joker.

La historia del Joker, previa a su enfrentamiento contra Batman y la fuerza policíaca de Ciudad Gótica, es un enigma, incluso él tiene dificultad en recordar los detalles de su vida anterior, por estar filtrados a través de su demencia.

Uno de los muchos recuerdos del Joker sugiere que alguna vez fue un comediante fracasado, un perdedor triste y patético, un viudo al que unos maleantes engañaron para que los acompañara en un robo, que los llevo por una fábrica de químicos. Según dicha relación, la policía mató a balazos a sus cómplices, y el hombre que se convertiría en el Joker, disfrazado con una capa roja, se tiró de clavado a un cubo de desechos químicos, para evitar que Batman lo capturara. Fue arrojado al río y logró llegar a la orilla, sólo para descubrir que la extraña mezcla de químicos había vuelto su piel de color blanco como la tiza, y que su cabello se tornó verde, y además, otorgó a su sonrisa la apariencia de una mueca espantosa. El impacto de la transformación lo llevó más allá del límite de la cordura… y el Joker había nacido.

Sin importar los eventos que realmente hayan creado al alevoso Arlequín, esté se estableció como el enemigo principal de Batman durante su primer encuentro, cuando extorsionó por millones de dólares a los más ricos habitantes de Ciudad Gótica, antes de que el Hombre Murciélago lo llevará ante la justicia. A partir de ese momento, el egomaniático Joker había encontrado a un oponente digno de su genio criminal, y halló que le daba mucho más satisfacción el burlarse de Batman, que el simple hecho de matarlo. Desafortunadamente, esta cortesía no se extiende a los amigos y aliados de Batman. Una vez que allanó la casa del Comisionado Gordon, decidió ejecutar una Broma Mortal lisiándo a Bárbara Gordon, disparando directamente en el estómago y la pelvis a quemarropa, dejándola totalmente inmóvil e incapacitada. Más tarde llevo a Gordon a un circo que le servia como base, donde lo desnudó y torturó con ayuda de sus compañeros del espectáculo de fenómenos, a su vez mostraba en enormes pantallas, por todo el lugar, las imágenes de la violación de su hija.

Otro de sus actos que más impacto a la vida del Caballero Nocturno es el hecho de que Joker fue culpable de una Muerte en la Familia; aprovechando su amnistía política el Joker salió libre del asesinato a sangre fría de Jason Todd, hecho que devasto al Caballero Nocturno durante años.

A pesar de, o precisamente por su demencia, el Joker es, sin lugar a dudas, el más brillante oponente de Batman. No confía en nadie y rápidamente extermina aquéllos lo suficientemente necios como para confiar en él. Con frecuencia, el Joker organiza sus crímenes en torno a temas o patrones enigmáticos que solo Batman puede deducir, tras años de angustiosas experiencias. Nuevamente como un criminal constante y también cliente del Asilo Arkham, Joker conoció a la doctora Harleen Quuinzel, cuya claridad médica se vició por sus prejuicios personales y pensó que el Joker erá totalmente sano y libre de culpas, e incluso la doctora después de cierto tiempo se convirtió en su aliada y casual novia, mejor conocida como Harley Quinn.

La inconsistencia maniaca es lo que hace al Joker una verdadera amenaza. Con frecuencia ha utilizado armas macabramente frívolas como cigarros explosivos mortales o zumbadores electrónicos manuales de alto voltaje; en otras ocasiones ha tomado cuanta arma se encontrara a la mano, fuera una palanca o una subametralladora y ha devastado todo a su paso.El Joker es un combatiente cuerpo a cuerpo promedio, y sin embargo, ha demostrado de vez en cuando los niveles anormales de fuerza inherentes a un orate. Su arma más infame es su “Veneno Joker”, una sustancia de su invención que, al introducirse en el torrente de sus victimas, deja los rostros de éstas deformados con una mueca similar a la del mismo Joker.